La historia es así: a principios de abril CulturizArte pidió, mediante el mecanismo establecido, el Auditorio de la Universidad, en principio para realizar una de las sesiones del Ciclo de Cine Suramericano que actualmente llevan a cabo. Dada la cercanía de la fecha con el Primero de Mayo, el Colectivo La Revoltosa le propuso a CulturizArte realizar una actividad en conjunto, lo que implicaba no exactamente ceder el uso del Auditorio sino cambiar la actividad, asunto totalmente lícito según el mecanismo establecido, no por nosotros sino la institucionalidad estudiantil. La actividad consistía en la proyección de material audiovisual y un conversatorio con el mundo obrero, totalmente coincidente no sólo con el espíritu de ambos colectivos sino también con la carácter del Primero de Mayo.El viernes 23 de abril, mientras terminábamos de ajustar los detalles de la actividad para poder comenzar la difusión, recibimos, a través de Facebook, una desagradable sorpresa: las Juventudes Comunistas (JJCC), la Nueva Izquierda Universitaria (NIU) y el Grupo Universitario Radical (GUR) convocaban a una actividad, organizada por Conciencia Creadora y patrocinada por la FECH, el mismo día, a la misma hora y en el mismo lugar en el que se realizaría nuestra actividad. Pero la sorpresa no fue sólo que estos tres grupos, juntos, convocaran a una actividad de este tipo, sino que ocuparan un espacio, el Auditorio, que ya estaba autorizado a Culturizarte. Paramos toda nuestra difusión hasta superar el, hasta entonces, mal entendido, cosa que no hicieron los organizadores del foro. El lunes por la mañana nos encontramos con una propaganda que inundaba la Escuela, contra eso La Revoltosa no puede hacer nada. No recibimos ni recibiremos patrocinio alguno de FECH.
La explicación de los organizadores fue la esperable: problemas de coordinación; simplemente no sabían que iba a haber una actividad en el Auditorio el jueves 29. ¿Por qué no sabían? porque no pidieron el Auditorio a través de los mecanismos pertinentes. Eso es comprobable: CulturizArte tiene el documento que autoriza a ocupar el espacio y ni Conciencia Creadora ni JJCC ni NIU ni GUR poseen carta alguna. Todo basado en una deducción lógica; si se hubiese pedido el Auditorio a través de parámetros establecidos, entonces estarían en conocimiento de su previa solicitud. Esto ha sido reconocido incluso por los mismos organizadores, en varias conversaciones y comunicaciones electrónicas, cada cual más subida de tono.
A nuestros ojos, esto constituye, más que un simple error o una falta de coordinación, un claro y vergonzoso abuso de poder por parte de los organizadores, que son, precisamente, dirigentes estudiantiles con cargos de representación. Deja ver, además, la falta de relación de los grupos ya mencionados con el resto de las organizaciones de la Escuela: CulturizArte y La Revoltosa fueron contactados sólo una vez que se les hizo ver que el Auditorio estaba pedido. No sólo eso, sino que confirma una vieja sospecha: los horarios protegidos no se están utilizando para fortalecer la organización al interior de la Escuela, sino para anquilosar a los conocidos dinosaurios, en la práctica y en el discurso.
Se dirá que en el afiche ya no aparece el lugar, que esa misma noche cambiaron la información. Era lo mínimo que podían hacer. El abuso de poder sufrido no sólo por CulturizArte y La Revoltosa sino por el estudiantado en general no se borra tan fácilmente, como tampoco la lógica de competencia y el aprovechamiento político que se desprende en una doble lectura. No entraremos en esa niñería y es por esto, y sólo por esto, que hemos decidido cancelar nuestra actividad.
Denunciamos aquí también el carácter de la actividad organizada por Conciencia Creadora y convocada por Juventudes Comunistas, Nueva Izquierda Universitaria y Grupo Universitario Radical, sorprendentemente titulada “Las Políticas Laborales en el Gobierno Actual; una mirada Crítica”. En primer lugar, la actividad parece querer, según el título, construir una mirada crítica sólo a las políticas neo-liberales del gobierno de Sebastián Piñera, que no son más que una continuación de las políticas laborales instauradas en la Concertación y defendidas por Claudia Serrano, Ministra del Trabajo del gobierno de Michelle Bachelet. En segundo lugar, se invita a una académica experta en Mercado Laboral, repetimos: Mercado Laboral, y a un alto dirigente de la CUT, cuestionado no una sino mil veces por diversos motivos, que sería excesivo discutir aquí. Lo mismo corre para CUT. No cuestionamos el conocimiento sobre políticas laborales que puede tener, y seguramente tiene, Claudia Serrano ni la comprobable calidad académica de Kirsten Sehnbruch ni la capacidad política de Cristian Cuevas. Lo que criticamos es que una actividad que se pretende conmemorativa del Primero de Mayo se centre excesivamente en una coyuntura política, la agenda del gobierno actual, sin tener una perspectiva amplia del desarrollo de las políticas neo-liberales; repudiamos que una actividad que se llama crítica no incluya, entre sus panelistas, a verdaderos jueces de esas materias sino a dirigentes de CUT, profesoras y ex ministras; ponemos en tela de juicio que una actividad del Primero de Mayo no se vincule con el mundo obrero sino con sus alto representantes. Esto a simple vista deja entrever que es una crítica política sin valoración técnica. La actividad, desde su título hasta sus invitados, deja ver el influjo ideológico de los convocantes: cómo piensan el Día del Trabajador y qué están dispuestos a hacer por las causas obreras.
La respuesta vacía, que adivinamos saldrá de la boca de los organizadores, que dice “al menos hacemos algo” no responde al cuestionamiento que levantamos. Se la pueden ahorrar.
Contra las políticas laborales neo-liberales y sus falsos críticos, La Revoltosa dice:
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